Sobre el proceso de crear imágenes, el grabado —y en específico la técnica de la monotipia— se convirtió para mí en un procedimiento a través del cual genero pinturas.

Aunque la idea proviene de distintas fuentes, fue principalmente el proceso creativo de Frank Auerbach lo que me impulsó a remover el material, soltar el control del resultado final y priorizar un enfoque más experimental. En este, los materiales y la pintura como disciplina se ven sometidos a otras condiciones, menos previsibles y más intuitivas.

Además de liberar la expectativa de obtener una imagen “bonita” y centrarme en el proceso, comencé a cuestionar el momento de detener la intervención sobre un soporte, o de continuar trabajando en ese espacio.

Como reflejo de esta práctica, estas dos imágenes redireccionan a mi portafolio dividido por áreas (grabado y pintura), disciplinas distintas pero unidas en mi proceso creativo.